El día 23 de abril de 2021, en la VIII edición del foro Futurismo, se llevó a cabo un fantástico tête à tête con Nicolás Rodríguez, CEO de DATHOS SCIENCE y experto en analítica e inteligencia. Nicolás compartió, a lo largo de toda la entrevista, su visión y comprensión de los datos, en la que se han ido tratando las múltiples vertientes: su utilidad, su función y su necesidad.
Nicolás ejerce su profesión tanto en el ámbito público como el privado. En cuanto al ámbito público, su empresa se encarga de llevar la gestión de datos relacionados con la enfermedad, la violencia y la muerte. En el caso del ámbito privado, sus funciones se especializan en la gestión empresarial partiendo de la inteligencia de negocio. Utilizan el presente para predecir el futuro, básicamente se trata de usar inteligentemente los datos.
La gestión de datos durante la pandemia en España
El especialista en analítica e inteligencia hace referencia a la cantidad de datos que produce España. Sobre todo a lo largo de esta crisis sanitaria. Sin embargo, tiene claro que ‘’uno de los errores más importantes que hemos sufrido en esta pandemia es no entender la importancia del dato’’. Por tanto, considera que España va ‘’rezagada’’, en comparación con otros países. Nuestras bases de datos ‘’no son nada del otro mundo. Ese es el problema, son obsoletas, están retrasadas’’.
Para justificar este hecho, pone como ejemplo la base de datos de defunciones de España. Únicamente figura completa en el año 2018, ¡tres años de diferencia!, que podía haber sido de gran relevancia para entender mejor la pandemia del COVID 19.
Según el CEO de DATHOS SCIENCE, ‘’todo es conducta y comportamiento’’, ya que la capacidad de predecir el futuro se basa en las variables citadas con anterioridad. Comenta que el problema que ha tenido España, en cuanto a la pandemia – que ha generado una enorme cantidad de datos tanto a nivel local, regional, nacional, como europeo –, es que se ha visto condicionado su análisis y predicción por la falta de calidad en los mismos. Y que, por su puesto, España no ha sabido como usarlos. La única manera de tener mayor calidad de datos es publicar más información y buscar la inteligencia del dato.
La capacidad de predecir el comportamiento humano
La inteligencia artificial es otro concepto tratado dentro de esta entrevista tête à tête. Nicolás comenta que una máquina es capaz de predecir el comportamiento humano siempre y cuando este comportamiento sea ‘’bueno’’. Pero cuando se trata de comportamiento ‘’malo’’, la cosa cambia, y las máquinas son incapaces de entenderlo y, por tanto, predecirlo. Esto es debido a que ‘’ las máquinas son máquinas, no sufren, no padecen, no tienen sentimientos, les da exactamente igual’’.
Al día tomamos 86.400 decisiones, la máquina tiene capacidad de almacenar millones de datos y, además, se añade la velocidad de procesamiento. Sin embargo, la máquina no tiene capacidad real para predecir el comportamiento humano. Para ello es necesario contar con otros humanos, porque ‘’el comportamiento solo puede ser predicho por otro humano’’.
En Canarias, debemos vender seguridad y protección
En cuanto a Canarias, considera que, para ayudar a solventar la situación turística actual. La clave está en la inteligencia artificial que ha de emplearse para ‘’proteger a nuestros clientes, visitantes y turistas, desde que salen hasta que vuelven a su casa’’. Esto solo se puede lograr prediciendo el comportamiento humano. También habla de que hay que ‘’convencer’’ a los turistas de que Canarias es un destino seguro, ‘’si tú vendes buena imagen, te compran imagen; si vendes mala imagen, te compran miseria‘’.
Ahora mismo tenemos que luchar contra los destinos que son competencia de Canarias, ‘’ya no en igualdad de condiciones, sino creyéndonos mejor que ellos y, para ser mejor que ellos, no solamente tenemos que serlo sino, también, parecerlo’’. Esto se puede lograr monitorizando a los turistas desde su país de origen. Se debe analizar ‘’qué tengo, qué espero y qué necesito’’, es decir, qué tipo de turista vamos a recibir y fidelizarlo para que este vuelva a Canarias. Pero, antes de nada, se tiene que entender qué es lo que pasa – en cuanto a COVID 19 se refiere – en esos países de origen; para, de esta manera, poder vender protección y seguridad.
Hay que ponerle nombre y cara a los datos
El experto comenta que en estos momentos todo gira entorno al COVID 19. La pandemia no va a terminar próximamente, incluso podría durar hasta el 2024. Por tanto, en Canarias lo que se debe hacer es predecir lo que puede venir, para ‘’que no nos vuelva a pasar lo mismo que el verano pasado y perder más temporadas’’. Portugal, Grecia y Croacia se llevaron todo el turismo el año pasado. Esto se debió al simple hecho de que supieron vender seguridad a los turistas. Según Nicolás debemos ‘’copiar lo bueno de determinados sitios’’ y pone como ejemplo a Disney, que -como los países anteriores- tuvo éxito porque supo vender seguridad.
La vacunación puede presentarse como una solución a corto plazo para remediar el COVID-19. Aunque el COVID ha venido para quedarse de manera definitiva y -tarde o temprano- se convertirá en algo estacional. Y por ello es importante lo comentado en el párrafo anterior: para el turismo de Canarias, la única salida factible ante esta crisis es vender seguridad.
Es cierto que no hemos sido capaces de entender esta pandemia, porque la realidad es que ‘’esta pandemia es una pandemia de comportamiento humano y de datos, y hasta que no entendamos eso, todo lo demás no va a tener ninguna solución’’. Por tanto, es fundamental que dejemos de imputar datos – que son turistas y personas- como si de simples números se tratase. Es necesario ponerles cara, nombre y apellidos a los datos generados, a los turistas o potenciales turistas. Sobre todo, tener en cuenta que lo único que quieren es ‘’ vivir bien y pasarlo bien’’.
La importancia del uso adecuado de los datos
Rodríguez defiende principalmente tres cuestiones que él considera fundamentales cuando se trata de datos. En primer lugar, que estos datos sean siempre públicos. En segundo lugar, que sean anónimos. Y, en tercer lugar, que estén fiscalizados por empresas externas que no tengan vínculo alguno con la entidad emisora. De aquí nace un debate latente en la sociedad actual, ¿qué uso le están dando a nuestros datos las entidades privadas? Google es una plataforma utilizada mundialmente: cada clic, genera datos.
El problema viene cuando esos datos se cruzan, ‘’cuando tú empiezas a cruzarlos te generan una cantidad de información muy sensible’’. Ya de por sí, estas grandes plataformas tienen muchos datos, si a ello le añadimos más datos nuestros (que además son de carácter personal), según Nicolás, ‘’ estamos generando, en mi opinión, un monstruo’’.
En cuanto a si le parece bien o no el hecho de que se quieran trazar nuestros movimientos, Nicolás se posiciona claramente, diciendo ‘’nadie tiene que saber lo que yo hago las 24 horas del día, no quiero ser parte de un Gran Hermano como ocurre en determinados países que todos sabemos. No me gusta’’. Aunque aclara que, si es una cuestión más global, como una crisis sanitaria o económica, podría entenderlo, siempre y cuando no infiera en la vida privada o personal de nadie.
El algoritmo y su capacidad de aprendizaje
Un concepto clave, dentro de este mundo del análisis y la generación de datos, es el algoritmo. El algoritmo viene siendo un sistema operacional que permite hacer cálculos y buscar soluciones a problemas. Sin embargo, Nicolás lo define como una habitación de juguetes, en la que cada día entra un niño con un juguete nuevo. Al final del mes, ese algoritmo ya sabe jugar a treinta juegos nuevos, es decir, tiene una capacidad de memoria tan potente que crea múltiples patrones. Lo que hace es aprender.
Por tanto, si ese algoritmo es nutrido con datos de terceros, se convierte en un algoritmo tremendo con grandísima capacidad de aprendizaje. Y es por esto, que el experto insiste en que los datos no caigan en manos privadas. La industria del dato es infinita y se ha de emplear para mejorar la sociedad y el mundo en que vivimos, y no para fines excesivamente privados.
Todos necesitan usar datos
Ello no quita que las empresas privadas necesiten los datos. Estos tienen mucha utilidad para las corporaciones privadas, puesto que a través de ellos consiguen identificar sus nichos y segmentos de mercado. Hacer uso de los datos para estas finalidades realmente es una cuestión de competencia. Pero cuando se habla de la administración pública, esta debería sacarle es máximo partido al uso de los datos ya que no tiene que repartir beneficios a nadie. La administración pública no tiene la presión de tener que dar resultados positivos al final de cada ejercicio, no tiene fines lucrativos.
Realmente las reflexiones de Nicolás Rodríguez llevan, sin duda, a darle una vuelta a este no tan complejo mundo de los datos. Son necesarios, son útiles y son, por otro lado, privados. Y lo cierto es que un uso inteligente, respetuoso y estrictamente enfocado a la mejora de la calidad de vida de todos, se puede convertir en una de las armas más eficaces contra esta y otras situaciones de incertidumbre y crisis. El futuro está en el correcto uso de los datos. Desde Futurismo Canarias esperamos haya sido de vuestro agrado y, por si queréis disfrutar de nuevo de esta entrevista y otros contenidos del foro, pincha aquí.
Redacción: Natalia Helen Eastwood